En el marco de su gira por Asia el presidente argentino, Mauricio Macri, analizó con preocupación un escenario que pueda terminar en el juicio político contra su par brasilero, Michel Temer.
En la jornada de ayer, un empresario arrepentido le presentó a la justicia un audio donde el Jefe de Estado de Brasil avala un soborno al expresidente de la Cámara de Diputados de Brasil Eduardo Cunha, con la finalidad de frenar ciertas investigaciones relacionadas con hechos de corrupción. El terremoto político que generó la información brindada por el diario O Globo no tardó en impactar en el gobierno Argentino.
“Sin dudas el escándalo de Temer va a tener un fuerte sacudón en nuestra economía y eso no es nada bueno”, destacó al portal Infobae un funcionario que acompaña a Macri en la gira asiática.
Por su parte fuentes de Cancillería le manifestaron al mismo medio que la crisis del caso Temer se “traducirá en incertidumbre e inestabilidad política de nuestro primer socio comercial que tarde o temprano golpeará a nuestra economía”.
Para el gobierno argentino la crisis llega en un momento donde ambos países comenzaban a fortalecer una relación estratégica, no solo por el intercambio comercial entre Brasil y Argentina, sino por los planes comunes de ambos mandatarios de expandir el ámbito del Mercosur al ámbito global.
En las últimas horas el Supremo Tribunal Federal de Brasil decidió retirar de su cargo al senador del oficialismo y excandidato a presidente Aécio Neves y al diputado Rocha Loures, cercano al presidente Temer, ambos involucrados en las grabaciones difundidas ayer.