La militancia kirchnerista, a tres años de haber perdido los privilegios del poder, todavía está desorientada. Como le ocurrió al aristócrata Louis Winthorpe III, personaje interpretado por Dan Aykroyd en la comedia De mendigo a millonario, que se vio en la calle luego de ser reemplazado por el vagabundo William Valentine (Eddie Murphy), los privilegiados del Gobierno anterior tienen problemas para aceptar la realidad del “llano”.
Carta Abierta, el grupo de intelectuales que se dedicó a defender las políticas implementadas por Néstor y Cristina Kirchner, no tuvo ningún problema de recursos mientras su espacio político estuvo a cargo del Poder Ejecutivo nacional. Hoy la situación es otra. Muchos de los intelectuales que trabajaban apoyando al Gobierno tuvieron que salir a buscar sustento en el sector privado y tuvieron que empezar a pagar por las actividades y comunicaciones.
Para ellos, antes todo era mucho más fácil. Miembros “trabajando” en el Estado, programas de la televisión pública dando pantalla a diario, financiación directa e indirecta. Todos los privilegios estaban a disposición de los grupos que querían dedicarse a apoyar al kirchnerismo.
Dado que estos grupos se formaron bajo el calor de los subsidios gubernamentales, las estructuras han tenido serios inconvenientes para autofinanciarse y conseguir recursos voluntarios. Este fin de año, los miembros de Carta Abierta que supieron tener todo el aparato de comunicación del Estado a disposición, no saben cómo juntar 300.000 pesos (USD $7.850) para financiar una solicitada en los medios.
El texto que quieren difundir se llama En tiempos difíciles, por el principio de la esperanza, y seguramente hace referencia a la necesidad de un nuevo mandato de Kirchner.
“Queridos compañeros, corremos riesgo de no poder salir con la solicitada en Página/12, por ejemplo, porque no estamos llegando a los aportes necesarios para hacer el pago previo a la salida del domingo 23 de diciembre”, manifestaron desde Carta Abierta en un comunicado.
La organización le pidió a sus seguidores que por favor “hagan el esfuerzo” de transferirle recursos, ya que “sería una lástima” no poder publicar la solicitada que expresa “una posición tan trascendente”.
Todavía les quedan algunas horas para conseguir los fondos, si no se tendrán que conformar con las redes sociales. Igualmente, aunque no lleguen con los recursos para publicarla en el periódico, seguramente el texto tenga repercusión en los medios nacionales.
Las manifestaciones de Carta Abierta rara vez pueden escapar al absurdo, por lo que suelen ser noticia nacional. Cabe recordar la oportunidad en que Ricardo Forster, miembro de la organización, que trabajaba en el Estado como “Secretario de Coordinación Estratégico para el Pensamiento Nacional”, manifestó que la inflación era un fenómeno que ocurría porque los argentinos eran felices y estaban dispuestos a pagar más por los productos.