“Hubiera querido que no tome esta medida, pero tiene que ver con lo que le pasa en el mundo. Aerolíneas Argentinas también tiene el problema, y Lufthansa también, la tuvo que socorrer el Estado alemán, lo tienen Alitalia y todas las líneas aéreas. Vamos a ver cómo evoluciona el tema”. Con estas breves palabras, el presidente argentino, Alberto Fernández se refirió a la salida de Latam del país. Claro que las aerolíneas comerciales tienen serias dificultades, pero el jefe de Estado decidió omitir otros datos no menores: que la empresa en cuestión no abandonó ningún otro país de la región y que Latam hizo una propuesta de reducir salarios hasta poder volver a operar. El Estado y los sindicatos se negaron.
Pero en la jornada de ayer otras declaraciones generaron más indignación que las del presidente argentino. El desvergonzado senador kirchnerista Mariano Recalde, que fue el titular de Aerolíneas Argentinas (AA) durante el Gobierno de Cristina Fernández, realizó impúdicas declaraciones, que se tornan escandalosas si vamos a su propio archivo.
En la última sesión parlamentaria el legislador peronista responsabilizó a la pandemia del coronavirus (COVID-19) como la causa final de la salida de Latam de Argentina. En un análisis simplista, el senador dijo desde su banca que la empresa “ganó con el kirchnerismo, perdió con el macrismo y no resistió al coronavirus”. Para el senador, el COVID-19 fue el “golpe de gracia” a la compañía que venía pasándola mal por “las políticas del macrismo”.
Claro que en el último período del expresidente Macri las empresas volvieron a perder y a caminar por la cuerda floja ante la grave crisis económica. Pero si alguna responsabilidad le cabe al exmandatario, es la de la continuidad del modelo estatista y deficitario que heredó del kirchnerismo y no supo o no pudo cambiar. Los procesos insustentables tienen varios capítulos y no hay que confundir la foto con la película. Las bases de la decadencia actual radican en el kirchnerismo, que dejó la bomba lista y se fue en diciembre de 2015. Ahora, ante el desastre inminente, el peronismo no hace otra cosa que responsabilizar al período 2015-2019 como el culpable de todos los males.
El verdadero Recalde y sus ideas “infraganti”
Mariano Recalde debería tener algo de decoro y evitar hablar de Latam y sus operaciones en Argentina. En 2013, cuando el actual senador presidía AA, fue filmado en una cena privada, donde reconoció lo que todo el mundo sospechaba: que el funcionario buscaba que el Estado argentino fuera más hostil con la empresa extranjera, para así favorecer a la “aerolínea de bandera”, en déficit permanente.
“Un día le fui a pedir (habla de Cristina) algo que después voy a negar: que le suprimieran rutas a LAN. Que el Estado le negara la autorización para volar ciertas rutas”. Cabe recordar que la chilena LAN fue fusionada con TAM al momento de la creación de Latam. La compañía era una de las pocas que contaba con unas rutas internas autorizadas que le hacían “algo” de competencia a AA en algunos vuelos de cabotaje. El planteamiento fue tan delirante que ni la expresidente Kirchner se animó a tanto.
La grabación se viralizó y en su momento salió en todos los medios argentinos.