El senador colombiano de izquierda y exmilitante del grupo guerrillero M-19, Gustavo Petro, mostró recientemente su respaldo a las políticas de gobierno que ha asomado el candidato del Partido Demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Joe Biden.
Petro, conocido por su verbo incendiario contra ciertas políticas de EE. UU., agregó que si estuviese entre sus posibilidades ejercer el derecho al sufragio en las tierras norteamericanas, lo haría por el exvicepresidente Biden.
Según dijo en una entrevista realizada por CNN, Petro respaldaría a Biden por el interés y el bienestar del pueblo latinoamericano, en el caso de que él fuese ciudadano estadounidense: “Sin dudas, votaría por él”.
Esta consonancia de pensamiento que se encontraría entre Gustavo Petro y el candidato demócrata estadounidense, Joe Biden, despierta suspicacias entre los analistas, puesto que se vislumbran acciones que han dejado ver cómo serían a groso modo las políticas nacionales e internacionales de la Casa Blanca, en caso de que Biden ganara la contienda electoral.
La elección de la senadora Kamala Harris como su compañera de fórmula para los comicios del 30 de noviembre es un guiño —al progresismo— hecho recientemente por Biden, aunque el Partido Demócrata tiene una historia racista, coloca un término de inclusión dentro de sus filas con una vicepresidente negra de 55 años, de padre jamaiquino y madre india.
Joe Biden hace pocos días lanzó un “plan de equidad racial” en el que esgrime cambios radicales en las leyes de empleo de EE. UU.
De acuerdo a EFE, con esta medida los empleadores más pequeños con solo uno o dos empleados enfrentarán responsabilidad ilimitada en demandas, por algunos temas tales como la discriminación o acoso cometido por un empleado, sumado a confusos cambios en la definición legal de ‘acoso sexual’, tópico que llevaría en teoría a pequeñas empresas a ser responsables de actos triviales por parte de un empleado.