Este viernes 17 de marzo la Policía Federal de Brasil llevó a cabo un operativo contra una red delictiva formada por frigoríficos e inspectores que vendían carne podrida y alimentos adulterados, y pagaban sobornos al partido oficialista para poder desarrollarse con libertad.
Según la Policía Federal, el Partido Democrático Brasileño, del presidente Michel Temer, se favoreció de sobornos que pagaba esta mafia de frigoríficos. Eso con el fin de que se les facilitase la venta de carne vencida.
“La investigación deja bien claro que una parte del dinero de las coimas —dàdiva— iba para partidos políticos”, entre los que estaban el oficialista y el Partido Progresista —movimiento que también respalda a Temer—, señaló el comisario de la Policía, Mauricio Moscardi.
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El operativo fue exitoso y la banda logró ser desarticulada. Señala el comisario que entre sus integrantes se encontraban fiscales sanitarios que recibían sobornos para flexibilizar la fiscalización, alterar fechas de vencimientos o adulterar carnes con agentes químicos.
Además, empezó una investigación contra importantes ejecutivos del país, entre los que se encuentra el dueño de las marcas Seara Alimentos y Big Franco, JBS.
Para la operación, que se dio luego de una intensa investigación de dos años, se tuvo que movilizar alrededor de mil agentes con el fin de ejecutar 389 órdenes judiciales. Además, 27 individuos en siete estados fueron sometidos a prisión preventiva.
“Los funcionarios públicos (…), mediante recibimiento de sobornos, facilitaban la producción de alimentos adulterados, emitiendo certificados sanitarios sin ninguna inspección efectiva”, señala la Policía en un comunicado.
Fuente: Clarín