El presidente de la Auditoría General de la Nación (AGN), Ricardo Echegaray, fue removido de su cargo luego de que el Juez Federal, Claudio Bonadio, lo procesó por los delitos de falso testimonio y violación de secreto mientras era titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
La causa por falso testimonio fue impulsada por el ministro de Hacienda y Finanzas de la Nación, Alfonso Prat-Gay, quien en diciembre de 2014, siendo diputado, denunció a Echegaray y a otros funcionarios de la AFIP por las acusaciones en su contra por una supuesta maniobra de evasión a través de una cuenta en Suiza.
La vicepresidenta argentina, Gabriela Michetti, señaló que el procesamiento de Echegaray es una herramienta legal “que necesitábamos para poder sacarlo de la Auditoría”.
“No vamos a perder ni un minuto para redactar la resolución que le quita esa responsabilidad, que debe ser ejercida por alguien que reúna otras condiciones éticas”, agregó Michetti.
La Constitución argentina y las leyes nacionales no permitían remover a Echegaray sin antes contar con un procesamiento judicial. “Ahora podemos negarle este cargo en esta institución tan importante de la República”, enfatizó Michetti.
Echegaray calificó la medida de “irregular, ilegal, nula e ilegítima”, mientras que el Partido Justicialista, que impulsó su nombramiento, también cuestionó el procedimiento que se está usando para sacarlo de la AGN.
La situación judicial de Echegaray se complica ya que también está investigado en la causa de la “ruta del dinero K” porque el Juez Sebastián Casanello quiere saber si protegió a Lázaro Baez; el juez federal Julian Ercolini lo investiga por no reclamarle al “empresario K” Cristóbal López AR$ 8000 millones (US$ 577.760.000) en impuestos a los combustibles; y el juez Sergio Torres quiere que explique cómo incrementó su patrimonio.
Su labor en la AGN también ha sido cuestionada por querer controlar en tiempo real al Gobierno de Mauricio Macri, lo que no es permitido por la Constitución argentina que establece que sólo se pueden elaborar auditorías una vez finalizado el ejercicio de la gestión.
Fuente: La Nación.