
La vicepresidenta argentina, Gabriela Michetti, se convirtió en el centro de las críticas luego que se conociera que de su domicilio robaron, a finales del año pasado, ARS$ 245.000 pesos (USD$ 16.150) y USD$ 50.000 dólares.
El robo ocurrió el 22 de noviembre de 2015 en la casa de Michetti en Buenos Aires, justo el día que la coalición Cambiemos ganó la segunda vuelta en las elecciones presidenciales, llevando a Mauricio Macri al poder. Aunque el hurto fue el año pasado, fue este fin de semana que se conoció del hecho.
Ante las críticas y los comentarios suspicaces, la vicepresidenta argentina aclaró que los ARS$ 245 mil provenían de donaciones para la cena anual de su fundación SUMA, organización sin fines de lucro, que según su portal web, “fomenta una cultura ciudadana de cooperación y trabajo colectivo”.
Michetti agregó que los US$ 50 mil fue un préstamo que pidió a su pareja para poder pagarle una maestría a su hijo, Lautaro Cura.
“Soy una de las políticas con menor patrimonio del país. Tengo sólo la mitad de mi casa y nada más. No tengo dinero en el banco, no tengo cuentas en el exterior, no tengo caja fuerte. ¡Ni un auto tengo! Y ahora debo dar explicaciones por este dinero”, señaló la funcionaria.
Asimismo, comentó que declaró ante la justicia lo del robo “porque tenía absoluta tranquilidad del origen de los fondos”. “Tengo la conciencia en paz”, agregó.
“Mi declaración jurada es siempre la misma, no he crecido en mi patrimonio”, señaló para responder a algunos medios que, según la funcionaria, dijeron que sí había crecido.
Michetti explicó que no había hecho público el hecho para no “entorpecer las investigaciones”. Hasta el momento las autoridades apuntan a un custodio de la vicepresidenta que pertenece a la Policía Metropolitana, David Juan Pablo Cruzado.
Las explicaciones de Michetti no convencieron al abogado Leonardo Martínez Herrero, quien este lunes 18 de julio solicitó una investigación penal para determinar el origen del dinero que fue sustraído de la casa de la vicepresidenta de la Nación.
Según el diario Clarín, la causa apunta a la “averiguación de delito” y se basa sobre información periodística del robo. Martínez Herrero sugirió que se profundice la investigación ante la eventual falta de consistencia de las explicaciones.
El dinero robado a la vicepresidenta se da a conocer en momentos en los que la opinión pública está muy sensible con los hechos de corrupción de funcionarios públicos de la gestión anterior, en los que el dinero en efectivo ha sido el protagonista.
El caso más escandaloso fue el del Secretario de Obras Públicas de los 12 años de gobierno kirchnerista, José Lopez, quien fue encontrado in fraganti el 14 de junio cuando intentaba esconder, en un monasterio femenino, USD$ 9 millones, euros, yenes, joyas y un arma de asalto.
La semana pasada, la justicia embargó las cajas de seguridad de la hija de la expresidenta Cristina Kirchner, Florencia, en las que encontraron más de USD$ 4 millones.
Aún está en la memoria de los argentinos las imágenes de Martín Báez, el hijo del empresario kirchnerista, Lázaro Báez, contando grandes cantidades de dólares en efectivo y trasladándolos en bolsos. Este video impulsó el procesamiento de los Báez por presunto lavado de dinero.