El fiscal federal Eduardo Taiano denunció este viernes al exsecretario de Seguridad Sergio Berni y a la exfiscal Viviana Fein por las irregularidades cometidas en la preservación de las pruebas y del lugar donde fue hallado muerto el fiscal Alberto Nisman.
Nisman fue encontrado muerto en el baño de su departamento el 18 de enero de 2015, justo un día antes de que presentara ante el Congreso su denuncia contra la expresidenta Cristina Kirchner y parte de su gobierno, por supuesto encubrimiento de iraníes vinculados al atentado de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en 1994.
El fiscal también pidió investigar al exjefe de la Policía Federal Román Di Santo, al primer juez de la causa, Manuel De Campos, al jefe de la Superintendencia de Interior y Delitos Complejos de la Policía, Roque Luna, y a cualquier persona que haya cometido alguna irregularidad la noche del 18 de enero de 2015 en el departamento de Nisman.
Taiano consideró que las irregularidades que se cometieron en el departamento del fallecido fiscal “se llevaron adelante con intencionalidad” y que hubo un “desprecio total” por parte de las más de 60 personas que estuvieron en el lugar.
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“El desprecio total con que actuaron todos quienes ingresaron al lugar del hecho –circunstancia que sin duda permite al suscripto enrolarse en la postura de que aquellos actos se llevaron adelante con intencionalidad– perjudicó gravemente la recolección de pruebas con la finalidad de dilucidar el desenlace fatal del Dr. Nisman. El panorama expuesto me permite afirmar que es muy factible que gran parte de los indicios existentes en el lugar no fueron recolectados”, sostuvo Taiano en el dictamen que fue publicado este viernes por el sitio de noticias Infobae.
A juicio del fiscal Taiano se violó el Manual de procedimiento para la preservación del lugar del hecho y la escena del crimen del Ministerio de Justicia argentino.
Destacó que la fiscal Fein, hoy jubilada, solo se limitó a circunscribir la potencial escena del crimen al baño en el que Nisman fue hallado sin vida, y de manera “secundaria” el resto del departamento del letrado. No fueron objeto de análisis las áreas externas del departamento, ni los sectores comunes (ascensores, escaleras de emergencia, estacionamiento, entre otras).
“Fein estuvo circulando sin ningún tipo de protección, además, se la ve, por ejemplo, sentándose sobre la cama del dormitorio del Dr. Nisman. Incluso fue una de las primeras que ingresó al baño, cuya preservación era primordial, sin tomar recaudo alguno”, señala el dictamen divulgado por Infobae.
Taiano sostuvo que el personal forense de la Policía Federal “pisó reiteradamente” una toalla que estaba en el baño y apoyaron sus manos en lugares donde había sangre. Tampoco se conoció en qué momento se levantó del piso el arma con la que murió Nisman y su celular no fue resguardo para posteriores pericias.
“El departamento del Dr. Nisman fue un desfile constante de personas”, dijo el fiscal, y agregó que “la mitad de los allí presentes no estaban cumpliendo labor alguna”.
“Aun esfonzándose es difícil encontrar un justificativo que permita explicar no solo la presencia del Dr. Berni (exsecretario de Seguridad del gobierno de Cristina Kirchner) en el lugar, sino también que aquel estuviera acompañando a la Dra. Fein, efectuando apreciaciones con respecto al accionar que debería llevarse adelante”, dice el informe de Taiano.
En septiembre los magistrados de la Corte Suprema de Justicia decidieron que a la causa que investiga la muerte del fiscal Alberto Nisman se radicara definitivamente el fuero federal, debido que podría estar vinculada con sus funciones como fiscal investigador del atentado contra la AMIA.
A casi dos años de la muerte del Nisman las hipótesis que se han manejado sobre su muerte han sido el suicidio, el suicidio inducido y el homicidio.
La investigación de la muerte del fiscal Nisman comenzó en la justicia ordinaria bajo la conducción de la fiscal Viviana Fein. Luego de un año, la jueza Fabiana Palmaghini decidió enviarla al fuero federal tras las declaraciones como testigo del exespía Antonio Stiuso, quien señaló que creía que a Nisman lo habían asesinado.
El único imputado en la causa, el técnico informático Diego Lagumersino, apeló la decisión de la jueza Palmaghini y la Cámara de Casación en lo Criminal y Correccional dispuso que el expediente volviera a la jueza del fuero ordinario.
El 5 de septiembre el fiscal de la Cámara Nacional en lo Criminal, Ricardo Sáenz, envió a la Corte Suprema un “recurso de queja” contra la decisión de mantener la causa en la justicia ordinaria. Finalmente, la Corte tomó en cuenta la apelación del fiscal Sáenz y la causa vuelve a la justicia federal.