Las Operaciones de Liberación del Pueblo (OLP) también conocida por el portal digital El Nuevo Herald como “El Escuadrón de la muerte” son una iniciativa que pretende disminuir la delincuencia y que fueron introducidas durante el régimen de Nicolás Maduro. El presidente venezolano indica que esta es una “exitosa iniciativa” que lucha en contra de la delincuencia y las bandas bandas delictivas de la mayoría de las zonas populares de Venezuela.
El coordinador de la ONG Provea, Inti Rodriguez, dijo que ellos “salen a matar y hasta el momento existen más de 700 ejecuciones extrajudiciales de estas OLP. Estaríamos hablando de más de 450 en lo que va de año y 245 para el 2015”.
Este plan de Operación de Liberación y Protección del Pueblo, según Venezolana de Televisión (VTV), está creado por el Ejecutivo Nacional y es su función es “proteger, resguardar y a liberar al pueblo de agresores internos y externos, como mafias y bandas criminales y que se han dedicado a delinquir y a crear zozobra en el país”.
Ya varios venezolanos han sido víctimas de este equipo. El caso de la señora Olga Meza de 38 años, es el más reciente. La mujer se encontraba durmiendo a las 2:30 a.m con su esposo y fue despertada por cinco hombres que portaban armas y que entraron a la fuerza a la humilde vivienda. Esos funcionarios se encontraban con el rosto tapado y estaban vestidos de negro.
La vivienda se encuentra en Villa Zoita en la isla de Margarita. A la pareja, la sacaron de forma violenta de la cama y al esposo lo llevaron a la sala, en donde le daban golpes y lo obligaban a permanecer en el piso con amenazas de muerte.
A Olga la hicieron ir al pasillo y la apoyaron en una pared. El hombre que estaba con ella, le presionaba el estómago con la rodilla, mientras mantenía su arma en la boca.
Seguidamente, los funcionarios fueron a la habitación de la hija de 19 años, en donde la patearon, la golpearon y le arrebataron al bebé que tenía en sus manos, aunque Meza confiesa que fue muy poco lo que lograba observar desde donde estaba, ya que el que la sujetaba la tomó por la cara mientras la obligó a mirar hacia el otro cuarto en donde se encontraban sus otros dos hijos, uno de seis años y otro de 16 años.
Uno de los hombres entró a esa habitación y con la luz apagada disparó sobre el mayor de los hijos cuatro veces. Su nombre era Ángel Joel Torrealba y la muerte fue reportada al día siguiente como: “un delincuente abatido por enfrentamiento armado con el CICPC”, la policía de investigaciones en Venezuela.
Esta muerte fue registrada bajo un informe que elaboraron entre las ONG Provea y Human Rights Watch. “Tan solo es una de las 700 ejecuciones extrajudiciales que son cometidas durante el régimen de Maduro, desde que el presidente introdujo las OLP”.
Pese a que el oficialismo catalogue las OLP como una iniciativa exitosa, el número de muertes es elevado y sigue aumentando, ya que el principal objetivo de las autoridades es “no llevar a los delincuentes a la justicia”, dice la ONG.
Este informe de las dos reconocidas ONG se llama Poder Sin Límites y afirma que la mayoría de esas ejecuciones fueron cometidas de imprevisto y justo cuando las víctimas se encontraban bajo custodia policial o desarmadas.
De estos 700 ejecutados ninguno tuvo la oportunidad de de contratar a un abogado para comprobar su inocencia. No obstante, se señala que muchos de los muertos no estaban realmente vinculados con bandas o actividades delictivas.
El informe indica que incluso antes de asesinar, los funcionarios no conocen la identidad de la persona. “Se acercó al cuerpo sin vida de Torrealba y miró el rostro de este, dirigió la mirada al agente que sujetaba a Meza, hizo un gesto con los ojos indicando decepción y sacudió la cabeza dando a entender que Torrealba no era la persona que estaban buscando”.
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La madre de Torrealba tuvo oportunidad de relatar los hechos y dijo que los agentes habían saqueado 172 viviendas en ese sector. Vecinos cuentan que robaron televisores, comida, ventiladores y equipos de aire acondicionados y a su vez, le preguntaban a los residentes si “conocían a alguien llamado Ángel Rodriguez”.
El informe reseña que sería una persona con el mismo nombre del hijo de Meza pero con distinta y edad y con otro apellido.
Inti comenta que esta lucha en contra de la delincuencia ya se dejó de tener un carácter netamente policial y ahora es llevada bajo filosofías y doctrinas cercanas a la de los militares en la guerra.
Gustavo González López, Ministro de Relaciones Interiores, mencionó el asesinato de dos policías por parte de delincuentes, en el momento en el que dijo que los asesinos serán llevados a justicia dijo que las muertes serán vengadas. El mismo día, asesinaron a 12 presuntos delincuentes.
Seguidamente, se denunció que al menos una de esas personas, no tenía nada que ver con actos delictivos ni con los hechos.
“Cada vez que lanzan una OLP eso son 15 o 16 muertos en supuestos enfrentamientos que en su gran mayoría no son tales”, comentó Mayorca desde Caracas. “En esos presuntos enfrentamientos, rara vez sale un funcionario de policía con un rasguño”.
Mayorca comenta que este “fenómeno” que se está presentando en Venezuela, no se asemeja al que registrado en Colombia, en donde los llamados “grupos de exterminio”, hacían labores de “limpieza social y política”.
La finalidad principal de estas operaciones es “el ajuste de cuentas” con los delincuentes, a pesar que estos organismos policiales utilicen la inteligencia militar, que provienen de bases chavistas como los colectivos.
Finalmente, estas bandas policiales lo que están logrando es que las bandas delictivas y criminales se unan con fuerzas y se consoliden megabandas con más de 50 integrantes para batallar libremente con los funcionarios.
Fuente: El Nuevo Herald