Urbano Pinedo Oliveros fue recapturado el pasado 26 de agosto por tentativa de homicidio, tortura, acto sexual violento, demanda de explotación sexual comercial en menores y por suministro de estupefaciente a persona menor de 18 años.
Pinedo había sido dejado en libertad por falta de pruebas y la presunta ausencia de una inspección técnica a fondo por parte de la Policía. Sin embargo, fue recapturado el pasado jueves a las 9:00 de la noche en Santa Marta, en compañía de un hombre que se encontraba armado, según lo informado por la Fiscalía Seccional Bolívar.
A diferencia de la primera ocasión, en la cual solo se hizo referencia a las lesiones personales sufridas por la adolescente, ahora el hombre es acusado por la presunta comisión de los delitos de tentativa de homicidio, entre otros crímenes.
Los ataque a la menor se dieron después de una fiesta. Urbano Pinedo había contratado a un grupo de vallenato, del que era parte la menor.
El padre de la víctima informó que el victimario obligó a la niña a subir a su apartamento, en un edificio de Bocagrande, en donde la golpeó, ella forcejeo hasta soltarse y saltó a la piscina desde un piso 26.
La niña logró sobrevivir, pero sufrió una “fractura de la escápula izquierda, contusión pulmonar, contusión hepática, fractura del pubis y laceraciones en múltiples partes del cuerpo”, según Hernando Pinzón, médico y director de la Fundación Hospital Infantil La Casa del Niño, quienes atienden a la menor desde la madrugada del pasado jueves. Asimismo, anunció que “la niña se encuentra hemodinámicamente estable y consciente, recibe analgésicos, antipiréticos y antibióticos”.
El Hospital de Bocagrande, en donde la menor fue atendida primero por urgencia, dijo que se encontraron rastros de drogas en el organismo de la menor. Sin embargo, en la clínica del Niño, a la que fue remitida, aseguró que en los exámenes practicados no encontraron secuelas de sustancias alucinógenos.
La fiscalía reclamó porque anteriormente “la Policía tampoco hizo una inspección técnica del lugar, no hubo entrevistas registradas de los supuesto músicos que estaban en la fiesta, tampoco presentaron los documentos de la menor en el informe, y ni siquiera registraron el hecho de que la menor cayó de un piso 26”.
Fuentes: El tiempo; El Nacional; El Heraldo.