El senado de Brasil aprobó este miércoles 31 de agosto la destitución definitiva de la presidenta Dilma Rousseff, por haber manipulado las cuentas públicas.
La defensa de Rousseff pidió que la votación fuera dividida en dos partes. En este sentido, solicitó que los senadores votaran por separado la pérdida del mandato y el impedimento para ejercer cargos públicos. Después de intenso debate, la petición fue finalmente aceptada por el titular del Supremo Tribunal Federal (STF), Ricardo Lewandowski y se votó por separado.
Se inició votando por la destitución y con 61 votos a favor, 20 en contra y sin abstenciones, Rousseff fue hallada culpable de crímenes de responsabilidad y destituida definitivamente al superar dos tercios del Senado, reglamentarios para su destitución, es decir, 54 de sus 81 miembros.
Luego el senado brasileño voto por la posibilidad de inhabilitar a Rousseff por ocho años; sin embargo, la iniciativa no tuvo los dos tercios necesarios de la votación para ser aprobada. Por la inhabilidad de la exmandataria votaron 42 senadores a favor, 36 en contra y tres decidieron abstenerse.
De esta manera Brasil pone fin a 13 años de Gobierno del Partido de los Trabajadores, que comenzaron con Luiz Inácio Lula da Silva en 2003.
Michel Temer, quien hasta hoy sustituyó a Rousseff de forma interina, ahora asume plenamente para terminar el mandato hasta el 2019.
Es el segundo jefe de Estado brasileño en sufrir un proceso de destitución en la historia reciente de Brasil. Fernando Collor fue destituido en 1992 por las acusaciones de corrupción que pesaron sobre él.
“Condenaron a una inocente”
La ahora expresidenta de Brasil Dilma Rousseff afirmó que se ha consumado un “golpe de Estado” con su destitución.
“Decidieron por la interrupción del mandato de una presidenta que no cometió crimen. Condenaron una inocente y consumaron un golpe de Estado”, dijo la exmandataria que se veía visiblemente afectada en una transmisión que compartió en vivo en su cuenta de Facebook.
“Es el segundo golpe que enfrentamos en la vida. La primera, el golpe militar, apoyado por la truculencia de las armas de la represión y la tortura, me encontró como una joven militante. El segundo golpe parlamentario ejecutado hoy a través de una farsa legal, me encontró en la posición para la que fui elegida por el pueblo”, dijo la exmnadataria.
Rousseff dijo que el proyecto progresista que encabezaba fue interrumpido “por una poderosa fuerza conservadora y reaccionaria, con el apoyo de una prensa partidista y venal”.
“Se capturarán las instituciones del Estado para ponerlos al servicio del más radical liberalismo económico y del retroceso social”, agregó.
Dirigiéndose al pueblo brasileño Rousseff dijo que la interrupción del proceso que comenzó con Lula (en 2003) “no es definitiva”. “Estaremos de vuelta. Volveremos a continuar nuestro viaje hacia un Brasil, donde el pueblo es soberano”, expresó.
“En este momento, no voy a decir adiós a ustedes. Estoy segura de que se puede decir hasta dentro de un rato”, comentó Rousseff al término de su discurso.
El rechazo de gobiernos amigos de Rousseff
Ecuador, Bolivia, Venezuela y Nicaragua condenaron hoy ante la Organización de Estados Americanos (OEA) lo que consideran un “golpe de Estado parlamentario” contra Dilma Rousseff
Los tres primeros países también anunciaron que retirarán a sus máximos representantes diplomáticos de Brasilia.
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa expresó su molestia por la destitución en su cuenta de twitter.
Destituyeron a Dilma. Una apología al abuso y la traición.
Retiraremos nuestro encargado de la embajada. Jamás cohonestaremos estas…— Rafael Correa (@MashiRafael) August 31, 2016
Corrrea dijo que la destitución “recuerda horas más oscuras de nuestra América” y manifestó su solidaridad con la exmnadataria y con Lula da Silva.
Por su parte, el presidente de Bolivia, Evo Morales usó la misma red social para anunciar que su país convocaría a su embajador en Brasil.
Estamos convocando a nuestro embajador en Brasil para asumir las medidas que en este momento se aconsejan.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) August 31, 2016
Morales increpó al secretario general de la OEA, Luis Almagro: “¿Dónde está Almagro?”Cuando se conspira contra gobiernos democráticos de izquierda no hay Almagro, sólo aparece para defender a la derecha”.
Condenamos el golpe parlamentario contra la democracia brasileña. Acompañamos a Dilma, Lula y su pueblo en esta hora difícil. #FuerzaDilma
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) August 31, 2016
El presidente venezolano, Nicolás Maduro se sumó al rechazo por la medida del senado de Brasil que deja a Dilma Rousseff fuera del poder.
Toda la Solidaridad con @dilmabr y el PueblodeBrasil,condenamos el GolpeOligárquico de la derecha¡Quién Lucha Vence! https://t.co/0MkBrgsTwE
— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) August 31, 2016