A pocas horas de la juramentación del cargo para presidente de los Estados Unidos, Donald Trump firmó una orden ejecutiva que apunta a la derogación y sustitución de la Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible, mejor conocido como Obamacare.
Sean Spicer, vocero de la Casa Blanca, aseguró que la intención del presidente es que los departamentos y agencias federales de salud alivien “la carga del Obamacare a medida que pasamos hacia el revoca y remplaza”.
El portavoz añadió que se trata de un paso temporal mientras el Congreso analiza las fórmulas para desinstalar el programa de salud pública vigente.
Por su parte, el congreso ya ha comenzado el proceso de derogación de la ley mencionada, a través de un procedimiento presupuestario que le permitirá comenzar con su eliminación legislativa.
Con 51 votos a favor y 48 en contra en el Senado estadounidense, la resolución dio luz verde a varios comités del Congreso para que se comience a preparar el desmantelamiento de la Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible.
El texto del decreto presidencial señala que están a la espera de la derogación del Obamacare, y que “es imperativo que el Poder Ejecutivo se asegure de que la ley se está aplicando eficientemente, tomar todas las acciones compatibles con la ley para minimizar las injustificadas cargas económicas y reglamentarias del acto, y prepararse para proporcionar a los estados más flexibilidad y control para crear un mercado de atención médica más libre y abierto”.
La Casa Blanca también enviará un memorándum a los ministerios para congelar la introducción de nuevas normas para la regulación de la economía aprobadas durante el Gobierno Obama.