Las universidades y calles de la capital chilena siguen a merced de las turbas feministas que vandalizan espacios públicos y privados con el fin de exigir un cambio educativo que alegan que afecta a las mujeres, entonces arremeten contra cualquiera que intenta dar o asistir a clases. Esta vez le tocó a un exiliado venezolano que quiso exponer lo que sucede en el país del cual huyó.
Por eso Gian De Biase, quien se autocalifica en su cuenta Twitter (@giandebiase) como “politólogo, analista internacional y propagandista, algunos me dicen profesor y otros loco ¡Lo que tengo seguro es que no soy comunista!”, afirma que es parte de una campaña que pretende volver inviable la gestión del recientemente elegido presidente Piñera.
Plantea que 36 diputados de la izquierda chilena, tanto el Partido Comunista como el Frente Amplio, votaron en contra de las sanciones que los demás legisladores planteaban contra el régimen de Maduro, pues son sus cómplices.
Por eso ahora sus simpatizantes buscan cerrar los espacios donde se expone la realidad del socialismo en Venezuela y por tanto en América, ya que expone lo que sus defensores buscan implantar en Chile.
De Biase presentó con éxito en la ciudad chilena de Valdivia una clase titulada: “La Venezuela del Miedo: el totalitarismo según George Orwell“, pero cuando intentó hacerlo frente a un grupo de estudiantes de la Universidad Católica de Chile en Santiago, una turba feminista irrumpió el evento.
Colocaron carteles con insultos y expusieron tweets del orador con las palabras “tonto”, “misógino”, “machista” e improperios locales.
Le gritaron “machista”, “misógino”, “acosador”, entre otros. Cuando confesó ser homosexual, le acusaron de haber acosado a un compañero suyo.
Sin embargo, no ofrecieron prueba alguna al respecto. Incluso señalaron al supuesto acosado, quien dijo que los presentes no eran un tribunal.
Junto a ellas había un joven que portaba un sombrero ruso de estilo soviético, con una estrella roja en el medio, representativa del socialismo que al irse replicó: “me encanta poder darte una sorpresa”.
Enseguida llegó un equipo de seguridad de la universidad e indicó al grupo que fueran tranquilos a sus clases.
“No podemos estar tranquilos si no se va”, respondió uno. Es decir, la presencia del orador venezolano les generaba intranquilidad.
Así que el politólogo y los estudiantes interesados en la charla fueron al patio de la universidad para seguir con el evento, pero la turba reapareció, esta vez una profesora intervino para dispersar el evento.
Pero los ataques contra el politólogo no terminaron en la universidad.
“Defender el libre mercado, quejarse del libre mercado… Amigas y amigos esto es simple: Ser facho sólo se justifica si eres cuico. Ser pobre y de derecha no sólo es una contradicción vital, es literalmente ser un completo y soberano retrasado mental”, fue la conclusión de una nota sobre Gian De Biase en la plataforma digital www.gamba.cl.
Describió así al politólogo exiliado, en vista que este publicó en Twitter lo difícil que es para un migrante alquilar un departamento en Chile, no solo por los precios, sino por los requisitos.
https://twitter.com/giandebiase/status/1007303463146008576
Es decir, así como los grupos que aducen “luchar contra los estereotipos de género” maltratan a un homosexual, los mismos grupos que aducen defender a los migrantes, no dudan en criticarlos y denostarlos cuando no encajan con su relato.
Aplican términos como “facho” que es la abreviación de fascista, nada menos que contra un defensor del libre mercado.
Resulta contradictorio ya que Benito Mussolini, padre del fascismo moderno confesó: “El fascismo rechaza frontalmente las doctrinas del liberalismo, tanto en el campo político como económico”.
Tanto el fascismo italiano como el nazismo alemán adoptaron la tercera posición, ni izquierda ni derecha.
Pero los procesos históricos en la actualidad parecen importar poco, tanto que con total impunidad se defienden ideas como las comunistas portando la misma vestimenta de los soldados que dieron muerte a decenas de millones de personas.
Así como portan la bandera y los símbolos de regímenes que declararon la homosexualidad un crimen federal, como la Unión Soviética.
Pues bajo el socialismo no hay lugar para el deseo y la voluntad individual. El hombre y la mujer viven en función de la revolución y su producción.
Por eso estas feministas se mostraron indolentes respecto a la realidad de las mujeres venezolanas que van a la frontera a regalar a sus hijos, ya que no los pueden alimentar o bien huyen a un país vecino para parir, ya que en Venezuela no hay las condiciones para hacerlo.
Frente a esto, De Biase responde que las luchas deben ser legítimas para ser defendidas, como la libertad que debe ser conquistada, no las campañas por mayor dependencia estatal en la forma de subsidios, como pretenden a quienes llama hembristas, ya que no luchan por la igualdad ante la ley, como aduce el feminismo, sino que exigen tratos especiales.