Se vienen las elecciones presidenciales en Argentina, y Mauricio Macri, golpeado por la situación económica, que empeoró en la segunda mitad de su mandato, busca un golpe de efecto para recuperar la imagen de “control” de la agenda.
Desde las usinas del poder Ejecutivo, los ideólogos de Cambiemos idearon un programa de diez puntos con acuerdos básicos con una finalidad concreta: que gane quien gane los comicios de este año, Argentina se mantendrá dentro de un núcleo de coincidencias básicas de razonabilidad, como ocurre en muchos países del mundo.
Macri espera tener su foto con los principales referentes de la oposición, con los que espera discutir el detalle del acuerdo, pero la invitación ya contó con el rechazo de algunos de los posibles candidatos principales.
Lavagna no va
El exministro de Economía de Eduardo Duhalde, Roberto Lavagna, no se mostró entusiasmado con la convocatoria y adelantó que no será de la partida. Para el candidato presidencial ,que hasta el momento se negó a participar de la primaria del peronismo, el llamado del presidente no representa un compromiso concreto, sino que es “más de lo mismo”.
Cristina da señales
Oscar Parrilli, mano derecha de la expresidente, se expresó esta mañana en radio sobre la inminente convocatoria y no descartó que Cristina Kirchner acceda a dar la señal política que busca Macri y hasta se llegue a fotografiar con él. “Siempre se ha sentado a hablar con todo el mundo, nunca se ha negado a hablar. No lo descarto, no hay ninguna negativa a hablar”, manifestó el exsecretario general de Presidencia.
Sin embargo, Parrilli reconoció que el llamado le parece oportunismo político: “Esto es para distraer la atención de la grave crisis que estamos atravesando. Sus políticas se contradicen permanentemente. Hablan de la independencia del Banco Central y hoy depende del FMI. Hablan de seguridad jurídica y son ellos los que hacen los acuerdos. Quieren arrastrar a todos a su plan desastroso de Gobierno”.
La reunión Macri-Cristina sería bastante particular, ya que no se han visto las caras desde antes de las últimas elecciones presidenciales. La exmandataria se negó a entregar los atributos en Casa Rosada y propuso hacerlo en el Congreso. Macri no aceptó y la expresidente renunció a su cargo dejando la presidencia en manos del senador Federico Pinedo, del PRO, por veinticuatro horas.
El peronismo dirá presente, en parte
El gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, y el senador Miguel Ángel Pichetto, candidatos del peronismo que ya aseguraron que competirán en una primaria justicialista, confirmaron la asistencia a la convocatoria. Sin embargo, la mesa peronista tiene también otro dirigente importante, el exintendente de Tigre, Sergio Massa. El referente del Frente Renovador se diferenció de sus dos socios políticos y adelantó su negativa, en sintonía con los argumentos de Roberto Lavagna.