El recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico ha permanecido cerrado, al igual que otros recintos, debido a la huelga de estudiantes que ya lleva un poco más de un mes. La huelga que fue convocada en oposición a los recortes al presupuesto de la universidad propuestos por la administración del gobernador Ricardo Rosselló y la Junta de Control Fiscal federal se ha tornado, como siempre ocurre, en una huelga de corte político.
No es coincidencia que esta huelga haya comenzado en momentos en los que el gobierno de Rosselló se prepara para la celebración de un referendo el próximo 11 de junio para ponerle punto final al tema del estatus político y colonial de la isla.
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La izquierda sabe que la mayoría del pueblo se inclina a la anexión a los Estados Unidos como el estado número 51 de la Unión Americana. Es por eso que por meses han estado jugando sus cartas para que el reférendum sea un fracaso.
Primero fue el brazo conservador del Partido Popular Democrático, intentado que el llamado “Estado Libre Asociado” (ELA) apareciera en la papeleta bajo el argumento de que sería una violación de derechos el no incluirlo.
Dicho partido invirtió cantidades de dinero en cabildeo en Washington para que la administración del Presidente de los EstadoUnidos, Donald Trump, a través del Departamento de Justicia se pronunciara a favor de incluir el “Estado Libre Asociado”. El Departamento de Justicia federal escuchó el clamor popular y emitieron una carta favoreciendo la inclusión del “estatus territorial actual”.
Dicha respuesta del Departamento de Justicia federal nos deja claro que el gobierno de los Estados Unidos reconoce el famoso estatus actual de la isla, falsamente llamado “Estado Libre Asociado”, un estatus político territorial bajo la cláusula territorial de la constitución de los Estados Unidos de América.
Sabemos que dentro del Partido Popular Democrático hay un pequeño grupo entre sus líderes que son independentistas, pero que se hacen llamar “soberanistas” para no perder el respaldo de los seguidores de ese partido que aunque no son anexionistas tampoco son independentistas.
Ese pequeño grupo liderado por la Alcaldesa de la ciudad de San Juan, capital de Puerto Rico, Carmen Yulín Cruz, también ha estado detrás de esta huelga y tampoco le conviene que el referendo se lleve a cabo. Este grupo de independentistas disfrazándose “soberanistas” no solo se consideran “enemigos” de los Estados Unidos, como dijera públicamente en una entrevista la Alcadesa de San Juan, sino que simpatizan y profesan el socialismo y se consideran aliados de gobiernos totalitarios como el régimen de Raúl Castro en Cuba, de Nicolás Maduro en Venezuela y el de Daniel Ortega en Nicaragua.
Nada de eso es historia nueva. Sabemos que los movimientos estudiantiles en Puerto Rico han sido respaldados tanto logísticamente como económicamente por grupos de extrema izquierda en la isla.
Lo vimos en marzo pasado cuando los estudiantes del recinto de Río Piedras celebraron la primera asamblea y la Juventud Socialista repartió panfletos, entre los presentes, donde pedían que se aprobara la huelga para “causarle problema” al gobierno de Ricardo Rosselló y a la Junta de Control Fiscal.
Luego vimos cómo estudiantes levantaban la bandera de la desaparecida Unión Soviética junto a la bandera de Puerto Rico, lo que sin lugar a dudas evidencia los verdaderos intereses de los huelguistas. Hoy vemos en el mes de mayo, aun con la huelga en curso, los estudiantes aprueban unirse al boicot al referendo del 11 de junio, asunto político nada que ver con la universidad. Esa determinación desenmascara totalmente la huelga.
Tal vez usted que lee esto, dirá que siempre aparece una persona que quiere “infundir miedo” diciendo que los huelguistas y los movimientos estudiantes y sindicatos son socialistas y en casos extremos hasta comunistas pero tal vez usted no ve en las redes sociales en grupos de Facebook los comentarios que hacen figuras como el presidente de la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER) Ángel Figueroa Jaramillo donde en el pasado ha publicado en las redes sociales mensajes políticos izquierdistas de corte socialista.
Ellos, ante los medios de comunicación, la prensa escrita, la radio y la televisión, no hablan de sus ideales porque saben que el pueblo de Puerto Rico no apoya ese tipo de ideologías. Ellos saben que son minoría y es por eso que se comportan de esa manera. Lo mismo ocurre con los movimientos estudiantiles.
Estos, al tratarse de estudiantes, son más expresivos con sus ideales y no tienen tanto reparo en expresarlos pero tras bastidores se encuentran personas que no son estudiantes, y su objetivo es el de utilizar a los estudiantes como conejillos de indias para promover el ideal independentista como el modelo político y el socialismo como el modelo económico.
También tienen líderes de izquierda que les proveen financiamiento clandestino y tienen portavoces que los representan en los medios como es el caso del presidente del Colegio de Abogados Alejandro Torres Figueroa quien en una entrevista en los principales canales de televisión, defendió los actos de vandalismo cometidos por encapuchados en la protesta del pasado primero de mayo.
El señor Torres Figueroa es predicador del socialismo, así lo dejó ver en el 2005 cuando prestó su residencia para que fuera el lugar del funeral de Filiberto Ojeda Ríos quien fuera el líder del Ejército Popular Boricua, el grupo guerrillero marxista clandestino mejor conocido como los Macheteros.
El líder de este grupo era un fugitivo de la justicia de los Estados Unidos por robo y terrorismo. El primero ocurrió tras robar el depósito de la Wells Fargo en West Harford, Conneticut en donde el grupo guerrillero hurtó siete millones de dólare. El segundo cargo que pesaba sobre Ojeda fue por el ataque terrorista en el Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín en Puerto Rico donde el grupo instaló bombas en la Base Aérea Muñiz de la Guardia Nacional Aérea donde destruyeron equipo militar con pérdidas ascendentes a los 50 millones de dólares.
Estos grupos continúan activos en la isla y son los que están detrás de estas huelgas. Cabe destacar que el ideal que profesan logra infiltrarse donde quiera que lo intentan. Lo lograron en el Partido Popular Democrático (PPD), un partido que alegremente predica “la unión con Estados Unidos”, pero que en cuyas filas se encuentran líderes de izquierda como Manuel Natal, LuisVega Ramos y la líder de este pequeño grupo Carmen Yulín Cruz.
Políticos que usan al PPD para poder salir electos ya que si se postularan bajo la insignia socialista como la del Partido Independenista Puertorriqueño o el Partido del Pueblo Trabajador, no llegarían ni a primera base.
La huelga en la UPR es otro de estos intentos de desestabilizar políticamente a Puerto Rico. Esto no es historia nueva. Todas las huelgas que han ocurrido en la UPR han sido bajo gobiernos anexionistas.
La primera huelga en 1970 ocurrió bajo el gobierno de Luis A. Ferré, la segunda huelga en 1981 bajo el gobierno de Carlos Romero Barceló, la tercera y cuarta huelgas en 1995 y 1998 bajo el mandato de Pedro Rosselló, la quinta en el 2010 bajo Luis Fortuño y ahora la actual huelga del 2017 bajo el gobierno de Ricardo Rosselló (hijo del exgobernador Pedro Rosselló).
Entonces ¿ cuál es el común denominador entre todas estas huelgas? Que todas han ocurrido bajo gobiernos anexionistas y todas son convocadas con el pretexto de “defender” algo en la universidad o algún “derecho”de los estudiantes pero que claramente terminan convirtiéndose en protestas más encaminado políticas antianexión que en necesidades sociales.