El Juez Sebastián Casanello y el fiscal Guillermo Marijuan, quienes investigan la causa llamada la “Ruta del dinero K“, viajarán a Estados Unidos para recabar información sobre las cuentas bancarias vinculadas al empresario Lázaro Báez, detenido por lavado de dinero.
El diario argentino Clarín, indica que el magistrado y el fiscal tomarán testimonio del abogado argentino, Ezequiel Sánchez Herrera, quien trabajaba en el estudio Cleary Gotlieb Steen & Hamilton (CGS&H), que defendió a la Argentina frente a los fondos buitres.
“Discovery” la acción judicial que intenta recabar información inició el fondo buitre más difícil para negociar, el NML de Paul Singer, rastreó los movimientos del empresario K y el Estado argentino. El “discovery” iniciado por el fondo NML contra el estudio panameño Mossack Fonseca, fue con el objetivo de conocer detalles sobre las 123 sociedades creadas en el estado de Nevada, Estados Unidos, vinculadas a Lázaro Báez.
Toda esta información, que comenzó a recibir el Gobierno argentino en 2013, estuvo a punto de perderse porque la exprocuradora del Tesoro, Angelina Abbona, intentó ocultarla en su casa una vez que se dio el cambio de Gobierno en Argentina. La funcionaria, acusada de encubrimiento, se vio obligada a entregar los datos a las autoridades.
Además de viajar a Estados Unidos, se espera que este mismo lunes 22 de agosto, el magistrado y el fiscal pidan un exhorto a Suiza para que confirme oficialmente que los cuatro hijos de Lázaro Báez controlan una cuenta en Suiza con US$ 25 millones. El diario Clarín señala que esta cuenta estaría a nombre de la fundación panameña de origen ilegal Kinsky.
El diario argentino agrega que el juez Casanello está preparando otro exhorto al paraíso fiscal Islas Seychelles para confirmar oficialmente si el corredor de bolsa Jorge Galitis y el abogado Edgardo Levita son los beneficiarios finales de Aldyne LTD, la empresa madre de las 123 firmas inscritas en paraísos fiscales vinculadas a Lázaro Báez en Nevada.
Según Clarín Levita manejó una empresa de aviones privados que la familia Kirchner usó mientras ocupaba la Presidencia, y fue quien más se movió para frenar la investigación sobre la “Ruta del dinero K”.
Además, figuró como representante en la Argentina de Helvetic Services Group, la compradora de la financiera SGI. En esta última se grabaron los escandalosos videos que reimpulsaron la investigación sobre la “ruta del dinero K”, y en los que se ve el hijo de Lázaro Báez contando grandes cantidades de dólares en efectivo.
Fuente: Clarín.