Una vez más Estados Unidos integró a cuatro altos funcionarios militares de Venezuela en la lista de sancionados de OFAC por haber participado en actos de corrupción y violación a los derechos humanos.
Estos cuatro sancionados se suman a los 49 vinculados al chavismo y “castigados” previamente. Se trata de Rodolfo Clemente Marco Torres, Francisco José Rangel Gómez, Fabio Enrique Zavarse Pabón y Gerardo José Izquierdo Torres.
Con estas nuevas sanciones, los activos de los afectados que estén en jurisdicción de Estados Unidos quedarán congelados inmediatamente, así como sus visas para viajar a suelo norteamericano.
Del mismo modo, se le prohíbe tanto a empresas como a ciudadanos estadounidenses tener relación comercial alguna con cualquiera de los sancionados.
“El presidente Nicolás Maduro y su círculo cercano continúan poniendo sus propios intereses por encima de los del pueblo venezolano”, dijo el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, en un comunicado.
Tesoro sanciona a 4 funcionarios del gobierno de Venezuela asociados con corrupción y opresión. Oficiales militares de alto rango y funcionarios que se benefician de la corrupción bajo el régimen de Maduro mientras ciudadanos, economía e instituciones democráticas languidecen. https://t.co/f9KRhp4X4M
— USA en Español (@USAenEspanol) January 5, 2018
Según Mnichin, con estas acciones el Gobierno de Estados Unidos subraya su intención de responsabilizar a Maduro y a otros involucrados por la corrupción en Venezuela y el mundo.
El secretario del Tesoro también hizo un llamado a la comunidad internacional para unirse a EE. UU. en su apoyo al pueblo venezolano para aislar aún más a la dictadura chavista.
El documento señala que
“Mediante sus propias acciones continuas, los cuatro funcionarios designados hoy han abandonado la misión republicana profesional de la institución militar, que, según la Constitución venezolana de 1999, debe ser “sin orientación política… y en ningún caso al servicio de ninguna persona o partidismo político”.
De acuerdo con la nota de prensa emitida por el Departamento del Tesoro, estas serían las razones por las cuales están sancionados los militares:
“Rodolfo Clemente Marco Torres es el Gobernador del Estado Aragua y Director Externo en el Consejo de Administración de Petróleos de Venezuela, S. A. (PDVSA). Marco Torres anteriormente ocupó los cargos de Ministro de Economía y Finanzas, Presidente del Banco de Venezuela y Ministro de Alimentación, y es un general retirado de las Fuerzas Armadas Nacionales Bolivarianas. Marco Torres ha sido supuestamente vinculado a esquemas de corrupción relacionados con la importación de alimentos, que están controlados por el ejército venezolano.
Francisco José Rangel Gómez es exgobernador del Estado Bolívar y está retirado del Ejército Nacional, con el rango de División General. Rangel Gómez ha estado vinculado a actividades de corrupción, como el fortalecimiento de las bandas armadas que operan en Bolívar y la presión sobre los tribunales para liberar a los miembros de pandillas que son detenidos, durante su tiempo como gobernador. Rangel Gómez también ha sido vinculado a redes de oficiales militares supuestamente corruptos.
Fabio Enrique Zavarse Pabón, División General de la Guardia Nacional Bolivariana, es el Comandante de la Zona Operacional de Defensa Integral de Capital de las Fuerzas Armadas Nacionales y también dirigió las Fuerzas de la Guardia Nacional Bolivariana en el Distrito Capital de Venezuela. Zavarse Pabón es presuntamente responsable de actos de represión por parte de miembros de la Guardia Nacional Bolivariana contra manifestantes callejeros en Venezuela.
Gerardo José Izquierdo Torres, General de División del Ejército, es el Ministro de Estado para la Nueva Frontera de la Paz y el Secretario Ejecutivo de la Comisión de la Frontera Presidencial. Supuestamente ha utilizado sus posiciones para sacar provecho de la corrupción a expensas del pueblo venezolano”.
De este modo, el Gobierno del presidente Donald Trump eleva aún más la presión sobre el régimen de Venezuela, después de varias rondas previas a altos cargos del Ejecutivo y del Poder Electoral.
La nueva decisión del Gobierno estadounidense demuestra que Trump no está dispuesto a doblegarse ante las amenazas del régimen de Nicolás Maduro, en las que señaló que de continuar las sanciones estarían en riesgo las elecciones presidenciales de 2018.
El régimen de Nicolás Maduro ha dejado ver que las sanciones internacionales son su debilidad, esto se ve reflejado en las negociaciones que mantiene con la oposición venezolana, pues una de sus exigencias es el cese de las sanciones en su contra.
Las acciones tomadas por Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea surgieron para castigar las constantes violaciones a derechos humanos por parte de la dictadura y los actos de corrupción emprendidos por funcionarios del chavismo. Estos gobiernos han dejado claro que las sanciones solo se levantarán, si es el caso, cuando se restablezca el Estado de derecho y la democracia constitucional en Venezuela.