Por segundo año consecutivo El Salvador cerrará el año con más de 5.000 homicidios. Howard Coto, jefe de la Policía Nacional Civil (PNC) informó la cifra a los medios de comunicación y añadió que de esos homicidios 557 personas eran miembros de maras.
Esta cifra es un 19 % mas baja que la del 2015, que para la misma fecha, siete de diciembre, ya se habían presentado 6.219 homicidios. Esa diferencia entre cifras, según las autoridades, se debe a las nuevas medidas de seguridad implementadas desde mayo por el Gobierno de El Salvador.
Las nuevas medidas de seguridad son una serie de disposiciones especiales para las siete cárceles destinadas exclusivamente a pandilleros. Estas medidas tienen un año de vigencia y fueron aprobadas por todos los partidos políticos.
- Lea más: Con atentados maras salvadoreñas planeaban tener atención mundial
- Lea más: Hacinamiento extremo en cárceles salvadores por medidas contra pandillas
Entre ellas se incluyen un régimen especial de internamiento dentro de las cárceles, aislamiento de los jefes pandilleros, suspensión de visitas (familiares y de asistencia legal), restringir movimiento de presos, se suspenden plazos y términos procesales para evitar que proscriban los delitos y medidas extraordinarias para evitar telecomunicaciones en los penales.
El año 2015 ha sobrepasado los 5.000 asesinatos; los años que más se le acercan son 2011 (4.371), 2006 (3.927) y 2014 (3.915). No obstante, el Ejecutivo de Salvador Sánchez Cerén sostiene que su principal “éxito” en el 2016 se dio en el tema de seguridad ciudadana. “En el año 2016 el éxito principal de este Gobierno ha sido el combate al crimen” encabezado por las pandillas y “no tenemos ninguna duda que el próximo año será el año de la consolidación de la victoria”, aseguró este miércoles el secretario técnico de la Presidencia, Roberto Lorenzana.
Dudosos “logros” de seguridad en El Salvador
Analistas de seguridad en El Salvador consultados por el periódico salvadoreño El Diario de Hoy ponen en entredicho las afirmaciones de Sánchez Cerén. Para los expertos el promedio de homicidios con que cerraría el año, no son suficientes indicadores que demuestren positivos. En las condiciones actuales, el promedio de homicidio es de 15 por día.
Carlos Carcach, criminólogo reconoció que ha habido una reducción de homicidios con respecto al 2015, un año que caracterizó de “atípico” porque “difícilmente vamos a llegar a cifras de ese año (más de 6.000 homicidios) cuyo incremento se dio a partir de julio o agosto de ese año”. Sin embargo, dijo que “una mejor comparación sería con el 2014 y todo parece que las cifras son similares a este año”. Comparado con el 2014, el experto estima que los resultados de 2015, indican que las cosas no han variado mucho.
El analista y exministro de Seguridad Francisco Bertrand Galindo sostuvo que es difícil saber si la criminalidad se ha reducido o no, porque las autoridades han tomado una “actitud cerrada y falta de transparencia” con respecto a la divulgación de las cifras reales de los homicidios y las extorsiones.
“El problema no se ha resuelto ni por cerca, aquí el problema es, si vamos mejorando o vamos empeorando, para eso la mera declaración de las autoridades no basta”, dijo Bertrand Galindo, quien agregó que “de continuar con esa actitud es difícil tener una idea y si es cierto, lo que ellos están diciendo”.
A pesar de que las medidas extraordinarias también tienen como propósito reducir las extorsiones, estas han ido en aumento, según una encuesta de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (FUSADES) divulgada en septiembre pasado. Los resultados de la encuesta detallan que el 23,7 % de las medianas empresas encuestadas expresó ser víctima de extorsión. Por su parte, el 17,9 % de la gran empresa dijo sufrir este delito, según cifras al segundo trimestre de 2016.
Migración de pandillas
Carcach también considera que el Gobierno le habría “declarado una guerra a las pandillas” que le ha permitido reducir el número de homicidios en los últimos meses. Consideró que la caída de los homicidios desde marzo pasado, al entrar las medidas extraordinarias, habría estabilizado el promedio de asesinatos entre 12 y 14 por día, similar al que se tenía antes de la tregua entre las pandillas.
Según Carcach las pandillas están emigrando a las zonas rurales, después de consolidar su control en los territorios urbanos, con el propósito de concentrar más esfuerzos en el control de las rutas de la droga.
- Lea más: Guatemala expulsa a salvadoreños cabecillas de Mara Salvatrucha
- Lea más: José Luis Merino, líder del FMLN y el hombre de las FARC en El Salvador
“Una vez ellas [pandillas], parecen haber consolidado el control del territorio en las áreas urbanas de una cantidad importante de municipios y asegurado un nivel de ingreso estable por la vía de las extorsiones y otras rentas, estos grupos podrían estar buscando posicionarse en lugares claves de la red de transporte de drogas”, dijo Carcach al analizar el fenómeno del desplazamiento de las pandillas a las zonas rurales.
Agregó que si resultara cierta esa hipótesis, entonces se “esperaría que los homicidios disminuyan, lo que parece haber ocurrido a partir de marzo del 2016 y el aparente éxito del gobierno sería dudoso”.
Fuentes: El Diario de Hoy, La Prensa Gráfica.