En una especie de “contragolpe”, Kenji Fujimori lanzó una nueva amenaza y advirtió que está dispuesto a ser testigo en Perú de los diversos casos de corrupción en los que podría estar inmersa su hermana Keiko.
Para conocer qué información podría manejar Kenji Fujimori y cuál podría ser su implicación, PanAm Post entrevistó al abogado y analista político Andrés Calderón, profesor e investigador de la Universidad del Pacífico.
“Kenji no ha dicho específicamente que vaya a participar en el caso Odebrecht ni tampoco que vaya a hacer una especie de delación compensada; parece que el mensaje que dio es un poco más político y una especie de advertencia para su hermana”, señaló Calderón.
Kenji quiere dar a conocer que no está acabado y que tiene armas para contraatacar a su hermana, creo que si tiene alguna información debería hacerlo pronto porque si no, va a quedar como el hermano resentido.
“Pienso que Kenji sí podría tener algún tipo de información sobre el maquillaje que se le pudo haber dado a presuntos aportes ilícitos. Por ejemplo, que el partido haya anunciado que el dinero se recaudó en eventos sociales, polladas o cócteles y que en realidad eso no fuera así. Ese tipo de información podría servir para seguir construyendo el caso contra Fuerza Popular, pero no necesariamente para concluirlo”, expresó.
Y es que luego de varios días de mantenerse bajo perfil tras la difusión de los “kenjivideos” donde el menor de los Fujimori aparecía intentando comprar votos en el Congreso. Kenji grabó un nuevo audiovisual para anunciar que aportará información sobre el partido Fuerza Popular en los casos que así lo ameriten.
“Me someto a todas las investigaciones, seré testigo en los casos que sea necesario y demostraré quiénes son los corruptos”, señaló Kenji.
En un correo electrónico enviado a los medios de comunicación locales, la congresista Maritza García, del grupo los “Avengers” de Kenji Fujimori, expresó que el menor de los hermanos se estaría preparando para revelar a la justicia, información sobre los presuntos aportes de Odebrecht a las campañas presidenciales de Keiko y su partido Fuerza Popular.
“Kenji va a dar el testimonio de los hechos que él conoce y va a ser un testigo protegido en el caso Odebrecht”, sostuvo la legisladora.
El Ministerio Público del Perú investiga a Keiko Fujimori y a su agrupación por el presunto delito de lavado de activos, pues la líder de Fuerza Popular habría recibido aportes ilícitos para sus campañas de 2011 y 2016.
Quizás el accionar de Kenji podría terminar de hundir políticamente a su hermana, retomando él la popularidad que perdió tras los “kenjivideos“. Si Kenji ofrece información relevante por el caso Odebrecht, Keiko puede terminar detenida mucho antes de lo que se esperaba.
Calderón señaló al PanAm Post que no cree que Kenji sea un “testigo clave”, pues el hermano menor de los Fujimori no ha formado parte de la cúpula partidaria del partido Fuerza Popular.
“A la Fiscalía lo que más le interesaría en el caso de financiamiento ilegal del partido, sería el ocultamiento de información y que esto configure un delito de lavado de activos. Eso es algo que yo supongo deben conocerlo muy pocas personas y no estoy seguro de que Kenji tenga esa información privilegiada”, señaló el especialista.
“Si quiere conservar algo de seriedad, Kenji va a tener que aportar algo más que solo amenazas”, sentenció Calderón.
“Hasta el cuello”
Hay que recordar que el principal testigo de la constructora, Jorge Barata, confesó en sus declaraciones a fiscales peruanos que el partido Fuerza Popular sí recibió aportes ilícitos de Odebrecht. Barata confesó que Odebrecht aportó en total USD $1,2 millones a la candidatura de Keiko Fujimori en las elecciones de 2011.
El exsuperintendente de Odebrecht en Lima precisó que en un inicio aportó USD $500.000 a la campaña fujimorista por intermedio de Jaime Yoshiyama Tanaka, entonces secretario general y jefe de campaña de Fuerza 2011, y Augusto Bedoya Cámere, exministro de Transportes durante la dictadura fujimorista y uno de los que habría financiado el viaje de Alberto Fujimori de Japón a Chile, en 2005.
Barata puntualizó que en ningún caso, salvo con Humala, entró en contacto o habló de los aportes con los candidatos. “No me comuniqué con Keiko Fujimori, todo se hizo a través de Yoshiyama y Bedoya”, aclaró.
Una “batalla familiar” por poder
Los hermanos Fujimori mantienen una riña familiar por poder y liderazgo que ha desmoronado fuertemente al fujimorismo.
Todo “estalló” con el intento de vacancia contra el ahora expresidente PPK que se dio en diciembre. El mandatario Kuczynski habría decidido liberar a Alberto Fujimori si Kenji y sus aliados se independizaban de Fuerza Popular e impedían la destitución.
Esta situación fue el punto de partida para que la familia Fujimori se fragmentara. Kenji fue expulsado del partido y Keiko mantuvo la cabeza del partido Fuerza Popular.
Dos meses después, ante un segundo intento de vacancia contra PPK, el partido Fuerza Popular expuso videos en los que aparecía Kenji Fujimori presuntamente intentando comprar votos para que el mandatario no fuera destituido; una situación que causó la renuncia del presidente de la República.
Queda esperar el desenlace de esta “telenovela política” en la que Keiko Fujimori es acusada de corrupción y Kenji de intentar comprar consciencias; al final ambos hermanos pueden terminar en la cárcel.