Los hijos de Cristina Kirchner, expresidenta de Argentina, tendrán que declarar por primera vez ante la justicia de su país.
Según el portal digital Clarín, Florencia y Máximo Kirchner son imputados por dos causas y sospechas de lavado de dinero. El próximo 6 de marzo es la cita ante un juez en Comodoro Py y según ese escenario judicial, ésta no será única vez que deberán asistir a los tribunales por la causa Hotesur S.A, en donde Gerardo Pollcita, fiscal del caso, pedirá la indagatoria en conjunto con la exmandataria, Osvaldo Sanfelice y Lázaro Báez.
Varias fuentes judiciales indicaron que esa causa la llevarán los jueves Claudio Bonadio y Julián Ercolini una vez finalice la etapa de instrucción. Uno de ellos analizará la pericia realizada sobre la empresa y en donde adicionalmente se detectó la falsificación de las firmas.
Florencia Kirchner, con 26 años de edad ha tenido un único trabajo desde mayo de 2015 como gerente de Los Sauces S.A y es la que menos actividad empresarial registra. En el 2011, fue dada de alta en la Administración Federal de Ingresos Públicos por una actividad completamente diferente a los negocios que la empujaron a los Tribunales de Comodoro Py y estaba inscrita para facturar por una supuesta “producción de filmes y videocintas”.
Para el 2014, estuvo en el directorio de una de las sociedades de su familia y fue nombrada directora de los Accionistas clase B en Hotesur, la firma de la dueña del Alto Hotel Calafate, actualmente investigada por lavado de dinero.
Como gerente de Los Sauces, tuvo un salario que variaba de los 47 mil a los 90 mil dólares mensuales.
La dueña del 22,5 % de las acciones fue citada por el juez Bonadio para declarar ya que tiene embargadas dos causas más de 5 millones de dólares y que fueron encontradas en el Banco Galicia.
Las fuentes judiciales señalaron que “Nada explica aún el origen de estos fondos”.
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Florencia justificó esta importante suma de dinero como parte de su herencia generada por la sucesión de su padre y por la cesión de bienes de Cristina que realizó en marzo de 2016 y según indican varias fuentes “resulta inconsistente” ese patrimonio que es superior al de su explicación.
La mayoría de ese dinero llegó a su nombre después de varias transferencias que su hermano Máximo le realizó a través de los Sauces y de la cuenta de la Sucesión de Néstor Kirchner.
Fuente: Clarín