Se atribuye al abogado y político francés Pierre Verniaud la siguiente frase: “Ciudadanos, tenemos razón para temer que la Revolución, como Saturno, devorará a sus hijos, y finalmente producirá despotismo”. Y al parecer muchas de las revoluciones socialistas están destinadas a devorar a sus hijos. Ese es el caso del socialismo del siglo XXI implementado por Chávez en Venezuela. El PanAm Post decidió indagar por algunos de estos hijos, otrora declarados chavistas, se opusieron al régimen de Nicolás Maduro. Conozca la historia de cada uno de ellos y cuál ha sido su suerte.
El exmentor de Chávez: Luis Miquilena
El escritor y político venezolano militó en el Partido Comunista Venezolano, Partido Revolucionario del Proletariado e incluso en el Movimiento Quinta República. El político de izquierda se opuso al dictador Pérez Jiménez y a la Cuarta República.
En un principio, apoyó a Hugo Chávez en su primer campaña presidencial. En 1999, el líder venezolano fue ministro del interior del comandante bolivariano. Posteriormente ocuparía el cargo de Presidente de la Asamblea Constituyente promovida por Chávez. Hacia 2002, con el viraje ideológico de Chávez, Miquilena rompió políticamente con el militar venezolano.
Durante sus últimos años de vida, Miquilena fue crítico del comandante venezolano. El líder político disidente apoyó la candidatura de Capriles Radonski. En 2015, llamó al fallecido presidente venezolano “farsante” e invitó a los venezolanos a marchar contra el régimen de Maduro. Miquilena falleció a los 97 años en noviembre del 2016.
El General que reestauró a Chávez: Raúl Isaías Baduel
El mencionado militar venezolano fue muy cercano a Hugo Chávez. Baduel fue uno de los fundadores del Movimiento Bolivariano Revolucionario-200 (MBR-200). El mencionado movimiento fue una organización política nacionalista fundada por varios militares venezolanos, la cual organizó el intento de golpe que lideró Chávez en 1992.
Baduel fue leal al líder bolivariano, incluso en los momentos más difíciles del gobierno del militar venezolano. De hecho, Baduel fue fundamental para la restauración de Chávez en el poder luego del intento de golpe de abril de 2002. El entonces general de paracaidistas dirigió la llamada operación “Restitución de la Dignidad Nacional”, que devolvió a Chávez al Palacio de Miraflores. El comandante-presidente agradeció a Baduel nombrándolo General en Jefe.
No obstante, hacia 2007, Baduel se pronunció en contra del proyecto de reforma constitucional chavista, que incluía transformar a Venezuela en una “democracia socialista” (propuesta llevada a las urnas: la mayoría de los venezolanos se opuso). Esta oposición a la reforma le costó a Baduel la enemistad de Chávez.
En 2008, el general venezolano fue acusado por actos de corrupción. Poco tiempo después sería encarcelado en la célebre prisión de Ramo Verde. El general permanecería casi siete años en la cárcel; fue puesto en libertad condicional en 2015.
Ismael García
García fue militante del Movimiento al Socialismo (MAS), organización política de centro-izquierda que en un principio apoyó a Chávez. En 2002, el MAS retiró su apoyo al gobierno bolivariano. Sin embargo, parte de la militancia del movimiento siguió apoyando al comandante venezolano. Aquellos que apoyaron a Chávez fundaron Por la Democracia Social (Podemos), uno de sus líderes fue García. El respaldo a la Revolución Bolivariana le dejó réditos políticos al Podemos venezolano. El partido logró obtener quince diputados en las elecciones parlamentarias de 2005, su líder, Ismael García, fue elegido.
No obstante, en 2007 las relaciones entre el chavismo y gran parte del movimiento de García entrarían en declive. En ese año Chávez propuso la creación del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). García y sus aliados se opusieron a disolver a Podemos en el PSUV. Además de no integrarse al PSUV, García y sus aliados se opusieron a la ya mencionada reforma constitucional de 2007.
En un principio, García, y gran parte de su movimiento, buscó crear un bloque independiente entre la Mesa de Unidad Democrática (MUD) y el PSUV. Sin embargo, en el 2009, una parte considerable de Podemos decidió integrarse en la MUD, apoyando a Capriles Radonski como candidato presidencial. La reacción de las instituciones chavistas no se hizo esperar. El logo y la marca de “Podemos” en Venezuela sería entregado a los rivales de García, los chavistas del partido.
García y sus aliados tendrían que crear un nuevo partido político: Avanzada Progresista. Finalmente, el líder político venezolano pasaría a formar parte de Primero Justicia, uno de los partidos políticos más importantes de Venezuela. García sigue oponiéndose al régimen de Maduro.
Henri Falcón: contra el régimen de Maduro
El abogado Henri Falcón fue uno de los principales promotores del Movimiento Quinta República (MVR). En la Asamblea Constituyente, el líder político resultó electo por el movimiento chavista. En el año 2000, Falcón fue elegido alcalde de Iribarren, Estado de Lara. A pesar de su cercanía con Luis Miquilena y el MAS, Falcón continuó apoyando a Chávez y se integró al PSUV.
Falcón sería elegido como gobernador del Estado Lara con el apoyo de los partidos chavistas en 2008. En 2010, el gobernador de Lara rompe con el PSUV y se integra a un partido chavista crítico: Patria Para Todos (PPT). De la misma forma que Podemos Venezuela, el PPT pasó de criticar al PSUV a integrarse a la MUD. El sector crítico del PPT perdió, al igual que Podemos, el control de la organización política a manos de los tribunales.
Debido a la adhesión de Patria Para Todos al chavismo, Falcón se uniría a García y a otros disidentes del chavismo para formar Avanzada Progresista. En la actualidad, el movimiento izquierdista está incluido en la Mesa de Unidad Democrática (MUD) y se opone al régimen de Maduro.
La Marea Socialista contra la corrupción de Maduro: Héctor Navarro y Jorge Giordani
Navarro ocupó las carteras de Energía Eléctrica y Educación. Giordani fue Ministro Planificación de Hugo Chávez y trabajó en el Gobierno de Maduro.
En 2014, Giordani renunció al ministerio que le había otrogado Maduro. El líder socialista denunció que el régimen de Maduro no ejerce el liderazgo que debe, así como no reformó la economía ni combatió la corrupción. Navarro apoyó a Giordani, razón por la cual ambos resultaron expulsados del oficialista PSUV.
Ambos líderes políticos han seguido denunciando la corrupción e ineficiencia de Maduro. Navarro y Giordani, socialistas nostálgicos del régimen de Chávez, simpatizan con el movimiento independiente Marea Socialista.
El futuro político de Venezuela
El modelo económico bolivariano ha mostrado su verdadera cara: inflación, corrupción, miseria e improductividad. En el terreno político, los resultados también son más que deficientes: autoritarismo, centralismo y represión a la oposición. No obstante, aún muchos venezolanos de buena fe siguen creyendo en el régimen de Maduro y en el modelo autoritario de Chávez.
Aunque algunos de los líderes mencionados aún defienden un sistema político socialista, todos han tenido la valentía de confrontar al poder autoritario bolivariano. Los ejemplos de Miquilena, Baduel, García, Falcón, Giordani y Navarro pueden ayudar a abrir los ojos de otros venezolanos que siguen engañados por la ideología bolivariana y sus líderes. Un gobierno de transición que abra las puertas a la necesaria liberalización económica y política de Venezuela requiere del trabajo de muchos venezolanos.